¿Cómo son los cubanos?

En los diez años que han transcurrido desde que se realizó el último censo en Cuba, han pasado en la Isla, ciclones, cambios de gobierno, reformas sociales y económicas, pero ¿cómo son y como viven los cubanos? Aunque es difícil estandarizar una realidad tan diversa, Juan Carlos Alfonso Fraga, director del Centro de Estudios de Población y Desarrollo de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), conversó con La República sobre la realización del Censo de Población y Viviendas de 2012, la investigación estadística más importante del país, que también incluyó la polémica. Para la realización del censo el país cuenta con 54 mil estudiantes que trabajaron como encuestadores y se habilitaron unas mil 500 áreas censales para la preparación, ejecución y control del estudio. A pesar de la envergadura del proyecto las dificultades de acceso se centraron en las zonas montañosas, “aquí no hay mafias ni pandillas como en otros países latinoamericanos que cobran a las autoridades censales un impuesto para poder entrar en los barrios”, afirma con orgullo Alfonso Fraga.



 El primer censo se realizó en Cuba en 1774, desde ese primer registro oficial se han desarrollado 18 investigaciones estadísticas de este tipo en la isla, tres de ellas desde el triunfo revolucionario. La novedad de esta ocasión es que se prestará especial atención a las preguntas relativas a las condiciones de acceso al agua potable, uno de los grandes problemas de un país que pierde en su red de distribución más de la mitad del líquido antes de llegar a los hogares, pero también hay interés en el estado constructivo de las viviendas y en las migraciones interiores entre las provincias cubanas. Activistas de los derechos de la comunidad LGBT en Cuba reprocharon que no se registre a las parejas del mismo sexo, algo que estaba previsto en un primer momento y finalmente fue tachado de los documentos originales, las autoridades censales justificaron esta decisión en un problema técnico, pero el bloguero Francisco Rodríguez señaló que “no hubo suficiente voluntad política de la dirección del país para rectificar”.


 Juan Carlos Alfonso Fraga minimiza el caso y asegura que “se convirtió en una polémica política porque en Cuba todo se convierte en una polémica política”, Alfonso Fraga señaló a La República que se quiso respetar la intimidad de los encuestados, “hay gente que no quiere que se sepa en su casa”, pero el responsable del censo evita cualquier suspicacia al respecto asegurando que la ONE hace estudios sobre la comunidad LGTB en Cuba porque “es un tema al que le prestamos atención” pero señaló que el “censo no es para eso, es para caracterizar grandes temas, por ejemplo tampoco se hacen preguntas sobre si la gentes es católica o abakuá”. Cuba garantiza el carácter anónimo de la información recopilada, Alfonso Fraga asegura que “el censo no tiene incidencia negativa para las personas, es por declaración y totalmente anónima, una vez se procesan los datos la persona encuestada pasa a ser un número”. Son los datos generales lo que interesan, porque este censo servirá para evaluar el proceso de reformas económicas y sociales impulsadas en el país tras la aprobación, en abril de 2011, del VI Congreso del Partido Comunista de Cuba, el gobierno podrá contar con información que le ayudará a conocer el impacto y a corregir algunas decisiones.


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Fuente:http://www.larepublica.es/2012/10/como-son-los-cubanos/